Preboda en Múnich {Paula & Alejandro}

“[…] Entonces intentas recordar en que momento comenzó todo y descubres que todo empezó antes de lo que pensabas…
Mucho antes… y es ahí justo en ese momento cuando te das cuenta de que las cosas solo ocurren una vez, y que por mucho que te esfuerces, ya nunca volverás a sentir lo mismo”
Federico Moccia – Tres metros sobre el cielo.

El cuento de Alejando y Paula comienza en las lejanas tierras bávaras, a donde un resuelto español viajó por trabajo y acabó encontrando amistad y, después, amor.

Paula, la hermana del mejor amigo de Alejandro, primero fue su (gran) amiga hasta que un día se dio cuenta de que había algo más. Sin saber muy bien cómo ni por qué, aquella amistad se había convertido en algo mucho más grande. Ser amigos estaba muy bien, pero ya no era suficiente.

Esta sesión de preboda en Múnich fue como una gran gymkana que comenzó por todo lo alto, en el Castillo de Neuschwanstein (el mismo que inspiró a Disney para construir el suyo). De ahí nos fuimos al espectacular lago Walchensee, donde alimentamos el espíritu con su paisaje y el cuerpo con un delicioso käsespätzle (mi nuevo plato favorito).

Al día siguiente nos esperaba un paseo por Glockenbach, Sendlinger tor, Marienplatz (donde lo que parece una catedral es el realidad el ayuntamiento), Odeonsplatz, Hofgarten, Englischer Garten… a toda velocidad porque debíamos ir a tomar unas “jarritas” de cerveza a la Frühlingsfest con los vestidos tradicionales bávaros (dirndl y lederhosen).

Tanto por conocer y tan poco tiempo para ello.

De este viaje volví con las tarjetas llenas de imágenes, mi mochila personal repleta de experiencias y con el firme deseo de regresar a Múnich.

Gracias Paula y Alejandro por ser tan fantásticos anfitriones. Nos vemos muy pronto!