Muy poco faltó para que tuviéramos que aplazar esta preboda, ya que un cielo cargado de nubes amenazaba con mojarnos hasta los huesos.
La lluvia no apareció y pudimos disfrutar de un maravilloso paseo en un pequeño pueblo madrileño. Apenas nos cruzamos con un par de personas (y una docena de gatos), y por las empedradas calles se respiraba el silencio y la tranquilidad que tanto cuesta encontrar en las grandes ciudades.
Beatriz y Josué son una pareja divertida y dinámica, compenetrados como pocas veces he visto en una pareja. Ella es alegre y risueña, además le encanta ser fotografiada… ¡un regalo para cualquier fotógrafo!
Josué no es tímido, aunque las cámaras le imponen cierto respeto y le cuesta un poco relajarse delante del objetivo. Menos mal que Bea fue mi gran aliada y consiguió que se olvidara casi por completo de mi presencia.
Gracias a ambos por regalarme estas imágenes. Espero que os gusten.
Un abrazo!
Hola guapos, porque estáis muy guapos, supongo que algo de mérito tendrá el fotógrafo. Aprovecho para fecilitaros a los tres, a los novios y a Sergio. Qué lo paséis genial en la boda con todos los amigos y la familia y también en el viaje. Y que las fotos sean igual de chulas.
Ya me enseñarán las fotos, caseras, Inés y Carlos. Un besazo fuerte!
Ana Hurtado, tu compi de CESFAC.
Muchas gracias, Ana!
Tengo que decir que están guapos… porque son guapos! 😀
Y en cuanto a las fotos de la boda, sin desmerecer las caseras, podrás verlas aquí mismo 😉